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domingo, 27 de diciembre de 2015

UCI vs ASO

LA GUERRA POR EL FUTURO DEL CICLISMO SE DESATA

ASO ANUNCIA LA INSCRIPCIÓN DE SUS CARRERAS COMO .HC PARA 2017

Hasta ahora no habíamos hablado de este peliagudo tema porque había una notable confusión y nada estaba claro. Es algo díficil de asimilar con lo cual relajate y vamos a ello.

Para comprender todo lo sucedido en los últimos meses tenemos que remontarnos a hechos todavía más anteriores. ASO, una empresa francesa dedicada al deporte, tiene el monopolio de las grandes carreras ciclistas. La empresa es propietaria de los dos monumentos más aclamados, París-Roubaix y Lieja-Bastoña-Lieja, está última es además la carrera más antigua del mundo. También controla las grandes vueltas puesto que cuentan con la más disputada en los últimos años, la Vuelta y la más prestigiosa de todas las carreras ciclistas, el Tour. Además, ASO es propietario de Dauphiné, París-Niza, Flecha Valona y París-Tours.

Una vez explicada la importancia e influencia que esta organización tiene en el ciclismo podemos comenzar a narrar los hechos sucedidos.

El 7 de Diciembre fue aprobada por la UCI la nueva reforma para el ciclismo que implica un sistema cerrado, atado más económicamente y menos ligado a los resultados estrictamente deportivos. Es decir, las licencias World Tour durarán 3 años y sólo al cabo de ese período se evaluarán a los equipos para subir o bajar de categoría. Esto también facilitaría la implicación de nuevos patrocinadores de forma más sencilla para los equipos ya que se garantizan 3 años en los escaparates más importantes del ciclismo. En definitiva, la organización UCI busca el confort y la estabilidad económica. En cambio, ASO aboga por un sistema abierto, en el que los equipos suban y bajen cada temporada en función de los resultados deportivos, de esta manera los equipos se verían obligados a luchar continuamente e inscribir a sus mejores ciclistas en más carreras. Para que lo entendáis mejor, explicado de una manera sencilla, la UCI apoya un sistema como las ligas americanas, NBA o NFL en las que solo se pelea por el campeonato y los equipos tienen una plaza asegurada y ASO quiere implantar un sistema como el que es usado en las ligas europeas de otros deportes como el fútbol, cada año, según los resultados deportivos hay equipos que suben y que bajan.

Hasta Mayo de 2016 no se abren las inscripciones de carreras y éstas, no se cierran hasta 2017 por lo que lo de ASO se trata más de una amenaza que de un hecho, un ultimátum para la UCI intentando implantar el sistema que a la empresa francesa le favorece. Si finalmente ASO decide inscribir sus 7 carreras en el calendario europeo, éstas pasarían a ser .HC, es decir, Hors Classe. ¿Y qué ventajas tendría eso? Bueno, a la empresa organizadora se le brindaría la potestad de elegir a sus participantes. Para entenderlo mejor, siendo WT está garantizada la presencia de los 18 equipos de esa categoría y quedan 4 invitaciones que ASO usa en equipos Continentales profesionales. En cambio, siendo una carrera del circuito europeo, los organizadores podrían elegir a todos los participantes, y es más, solo el 70% de los participantes podrían ser WT. Esto quiere decir que al Tour, habiendo 22 equipos solo 15 de ellos podrían ser de la máxima categoría quedándose tres equipos top fuera de la carrera. Entonces está claro lo que ASO busca: Poder. Recordamos que esto sería para 2017 y en adelante, en 2016 las cosas seguirán como siempre.

¿QUIÉN VA GANADO POR AHORA?
Está claro, ASO. Poniendo sus carreras, especialmente el Tour, en la categoría continental, da igual que la UCI garantice tres años en la máxima categoría, los patrocinadores no asegurarían su presencia en gran parte de los mayores escenarios que el ciclismo brinda a estos sponsors. Los equipos tendrían más difícil todavía el conseguir patrocinadores que es lo que sustenta un equipo y este deporte. La empresa francesa tiene la sartén por el mango como se dice aquí, en España.

¿QUIÉN PIERDE?
Fácil, todos menos ASO. Las carreras perderán participantes top, el aficionado no podrá ver a grandes ciclistas en las grandes carreras además de lo confuso de la situación, los equipos no pueden asegurar a sus patrocinadores la presencia en el mayor escaparate del ciclismo como es el Tour, los ciclistas vivirán una situación estresante, confusa y sobretodo muy poco estable y el sistema de la UCI podría quedar patas arriba.

¿QUE PUEDE PERDER ASO EN ESA SITUACIÓN?
Principalmente participación en sus carreras menores como Niza o Dauphiné ya que los mejores equipos optarían por Tirreno o Suiza por la importancia que tendrían los puntos WT. Aún así, ASO podría negar la participación en el Tour a aquellos equipos que no participarán en sus carreras menores. También perderían a algunos grandes ciclistas debido a que 3 equipos top no participarían en la carrera, pero podrían ampliar el número de equipos para así poder llevar a los 18. En definitiva ASO parece que tiene en estos momentos la última palabra.

¿QUÉ OPCIONES TIENE LA UCI?
 Pocas pero puede hacer algo. Esta guerra ya viene de lejos y como pasó en 2008 es como pueden actuar. La unión hizo a los equipos escoger entre ellos y ASO amenazando con sancionar a los equipos que participaran en sus carreras pero eso parece poco probable teniendo en cuenta el carácter del presidente de la UCI, Brian Cookson, el cual no tiene nada que ver con su predecesor Pat McQuaid.

La segunda opción sería formar una coalición entre la UCI, RCS (segunda máxima organizadora de carreras ciclistas, entre ellas destacan el Giro, Milan-San Remo, Tirreno Adriático y el Lombardía) y los equipos. Si eso se produce sería una unión suficientemente fuerte para hacer prevalecer el actual sistema. Sería dar entender a ASO que sin los equipos grandes el Tour no puede seguir siendo lo que es.

Por último, buscamos antecedentes históricos y para encontrarlos no hay que irse muy lejos. En 2008 las tres grandes vueltas se juntaron para protestar sobre el modelo ProTour en el cual los 20 equipos ProTour tendrían la participación asegurada lo cual no daba margen a las organizadoras de elegir unos pocos equipos a invitar. Ese año se materializaron las amenazas y ASO dejó fuera del Tour al Astaná, que contaba con Alberto Contador, por aquel entonces defensor del maillot amarillo conquistado en 2007. Finalmente consiguieron la erradicación del sistema ProTour instalando el actual World Tour con 18 equipos en lugar de 20.